Un poco de vanidad cunde mucho.

Hay gente convencida de que todo cuanto hace es genial y de que su aspecto es siempre fabuloso, por mucho que no sea así. Tienen esa capacidad de convertirse en animadores de sí mismos, aun cuando el suyo sea el equipo perdedor. Los narcisistas truecan realidad por fantasía. Pero no es que sufran un transtorno de la personalidad, es que son producto de su propia cosecha. El único mundo que importa es el que tú te has creado, aquel en el eliges vivir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario